El impacto negativo que la pandemia de COVID-19 ha tenido en la respuesta global contra el VIH/sida podría causar entre 69 mil y 148 mil muertes adicionales en el mundo entre 2020 y 2022, advierte un informe del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/sida (Onusida).
El informe, publicado en vísperas del Día Internacional Contra el Sida (1 de diciembre), concluye que los problemas endémicos en la respuesta a esta enfermedad, que causó 690 mil muertes en 2019, contribuyeron a que otro virus, el COVID-19, se propagara más rápidamente este año.
“Los progresos de los últimos años están amenazados en muchos países, con los servicios de atención al VIH interrumpidos, y las cadenas de abastecimiento cortadas para muchos productos básicos”, señaló en la presentación del informe la directora ejecutiva de Onusida, Winnie Byanyima.
La política ugandesa subrayó que “el mundo ha cambiado en los últimos meses, y en él la COVID-19 ha empeorado las desigualdades que otra pandemia, la de VIH/sida, también había generado”.
El principal mensaje del informe es el de urgir a los gobiernos a aprender la lección que la falta de inversión en salud ha tenido en la pandemia de COVID, y aplicarla también en la respuesta contra el VIH/sida.
“Vemos ahora el fuerte vínculo que existe entre nuestra salud y la de la economía mundial”, señaló Byanyima.
La máxima responsable de ONUSIDA explicó que especialmente en los primeros meses de 2020 hubo una preocupante caída de aproximadamente el 50 por ciento en el número de pacientes diagnosticados con VIH, que no respondía a una menor incidencia del virus sino a la interrupción de muchos servicios de atención médica debido al COVID-19.

