
Salomé es un comedor donde desde hace 63 años preparan unas de las garnachas más reconocidas de la ciudad… ¿las has probado?
Carmen Lara
El Mundo de Orizaba
La historia de Salomé nace en el año de 1957, en un ambiente cálido y hogareño en Ciudad Mendoza, donde la señora Salomé Campos Jiménez cocinaba junto a su familia sus tradicionales garnachas rojas.
El nieto de la señora Salomé, Yanuario Sánchez, platica que su abuela discutió con su familia y se vino a vivir a Orizaba. Con los pocos ahorros que tenía, Salomé rentó un local, lo pintó y así fue como comenzó a escribir su historia en el mundo de la gastronomía.
“Mi abuela tenía un amigo que la ayudó mucho y él fue quien le sugirió el nombre del local, ella venía del Café Luz, por su mamá Luz Jiménez, entonces era una buena idea ponerle su nombre al local y así es como Salomé llegó a Orizaba”, relata Yanuario, su nieto.
Se lleva clientes
Como doña Salomé era una persona muy conocida en Mendoza y muchos orizabeños iban hasta allá solo para probar sus garnachas, al saber que había llegado a la ciudad, comenzaron a frecuentar su local.
El sabor, la calidad de sus productos y la salsa de sus garnachas rojas, han sido la combinación perfecta para que Salomé se haya logrado posicionar como uno de los lugares favoritos para ir a comer garnachas.
Una de las cosas que recuerda el nieto de la señora Salomé, es que ella siempre decía que mientras hubiera calidad, un buen sazón y trato, siempre se iba a tener éxito.
Éxito que su nieto atribuye totalmente a la calidad de sus productos, pues se han logrado mantener durante 63 años en el gusto de los orizabeños con sus tradicionales garnachas bañadas en salsa roja.
Son peculiares
Las famosas garnachas de Salomé son muy peculiares y diferentes a las que comúnmente conocemos, éstas son preparadas con tortillas de mano especiales, es decir, que puedan soportar la temperatura de lo frito y no se desbaraten.
Inicialmente éstas se vendían por orden, sin embargo, actualmente también se venden por pieza, para el gusto de los comensales; las originales son las garnachas de salsa roja.
Sin embargo, actualmente también cuentan con salsa verde, la diferencia, es que estas garnachas no llevan un frito especial como las rojas, lo cual hace una gran diferencia entre sabores.
Yanuario asegura que todos sus productos son de alta calidad, apoyando el comercio de los productos nacionales y locales, con las mejores verduras, especias, carnes y quesos para toda la variedad de antojitos que tiene Salomé.
Pocos y al momento
Es por esto que en ocasiones a la gente se le hace raro que cuando llegan al lugar les digan que ya no tienen garnachas o algún otro alimento, la realidad de todo esto, es que como los productos caseros, una vez que se terminan, ya no pueden producir más hasta el siguiente día.
Todo esto con el objetivo de brindarle a los comensales antojitos frescos, del día y con la mejor atención, justo como lo hacia la señora Salomé cuando inició con su local.
Es familiar
Es un negocio totalmente familiar que ha pasado de generación, en generación, actualmente es atendido por Yanuario Sánchez.
Salomé ha pasado por tres generaciones familiares, la primera por doña Salomé Campos Jiménez, la segunda con doña Carmen Rosado Campos y la tercera por su hijo Yanuario Sánchez, quien lleva 20 años al frente del negocio.
Clientela fiel
Algo muy especial de Salomé es que hasta la fecha, después de 63 años llenos de sabor, salsa roja y muchas garnachas, siguen conservando clientes que estuvieron cuando la señora Salomé abrió su negocio en Orizaba, lo que es garantía de que hasta la fecha mantienen el buen sazón.
¿Y de dónde viene?
De la Redacción
El Mundo de Orizaba
Algunos dicen que es de origen prehispánico, mientras que otros señalan que fue un invento de alguna mujer que se le hacía tarde y tenía que ponerle el “itacate” al esposo y agarró lo primero que encontró, lo cierto del caso es que la garnacha es un platillo delicioso.
Aunque no nos quede claro de dónde viene, es necesario sí aclarar, que la garnacha va cambiando su estructura y su forma de cocinarse dependiendo del lugar donde se esté, pero de una cosa estamos seguros y es de que llevan picante ¡siempre!.
Antes de entrar en detalles de zonas y demás, es necesario acotar que en la Ciudad de México se le conoce a la garnacha a todo el producto callejero salido del comal, sin importar la forma, pero esa es otra historia.
Por regiones
La garnacha veracruzana se consume en Xalapa, Orizaba y Rinconada, así como pueblos vecinos y hemos de aclarar por ahí que Rinconada se ha declarado como el pueblo de la garnacha. Justamente ahí salió aquella historia de la mujer que hizo la tortilla con salsa por las prisas.
El punto es que en esta región la garnacha es muy similar: Se trata de una tortilla de maíz untada con salsa, pasada por manteca de cerdo, rellena de carne de cerdo y cebolla picada, aunque cabe aclarar que en la zona de Orizaba se le pone también papa hervida y por el peso de este taco, va como doblada.
En el diccionario de cocina de Larousse apunta que: En el norte de Veracruz, los nahuas las preparan con la tortilla untada con frijoles y una mezcla de carne de pollo deshebrada, chayotes cocidos, cilantro, cebollinas picadas y queso y luego se bañan en salsa.
Mientras que en la región de Los Tuxtlas se les conoce como corcholata, se preparan con tortillas pequeñas y gruesas, con una división que separa los dos rellenos típicos: frijoles negros refritos y picadillo de carne de res. Se sirven espolvoreadas con queso seco rallado y tomachile.
En otros lugares
También hay distintos tipos de garnachas en: Puebla, Oaxaca y Yucatán.
El top
Los lugares más populares para comer garnachas en Orizaba son:
El Portalito
Ubicadas en Poniente 7, por el teatro Metropolitano
Famosas por: variedad de fritangas y las salsas
Salomé
Ubicadas en Poniente 7, por la iglesia de San José
Famosas por: garnachas rojas con toque especial
Antojitos Raquel (Doña Librada)
Ubicadas en Sur 6 entre poniente 11
Famosas por: garnachas con salsa picante y las tripas
Con información de El Mundo